Trastornos neurológicos: Encefalitis y Accidente cerebro vascular. Prevención, Riesgos, esperanza de vida y tratamientos. Un largo camino a casa.
Existen dos tipos de encefalitis la primaria que es causada por una infección directa en el cerebro en la cual se localiza en un solo sector y la secundaria que es causada por una complicación de algún cuadro viral, como puede ser la gripe, la varicela etc. Estas suelen detectarse cuando aparecen síntomas como fiebre, dolor de cabeza, confusión y hasta pude generar un Accidente Cerebro Vascular (ACV).
La menos habitual es la llamada encefalitis por herpes simple (HSE) y es la que abarca a dos de cada un millón de personas. Los pacientes con esta enfermedad suelen presentar síntomas parecidos a la gripe. En los casos mas graves pueden tener dificultades con el habla y la audición, visión doble, alucinaciones, cambios en la personalidad, pérdida de la conciencia, pérdida de la sensación en algunas partes del cuerpo, debilidad muscular, parálisis parcial en las piernas y en los brazos, demencia grave súbita, deterioro del juicio, convulsiones y pérdida de la memoria. Cualquiera pueden contraer esta enfermedad sobre todo las personas con sistemas inmunitarios debilitados como los portadores de VIH o los que toman medicamentos inmunosupresores.
Uno de los dos casos del millón se dio en el 2006.María es hija de Carlos, cuenta que su padre padeció durante tres días un dolor de cabeza muy intenso, el 23 de diciembre a la madrugada Carlos se levantó y su esposa notó que estaba perdido en medio de la sala y completamente mojado. Inmediatamente lo trasladaron al sanatorio ITOYS de Avellaneda, en la ambulancia había sufrido dos convulsiones que lo obligaron a dejarlo en observación dentro de terapia intensiva.
Durante el lapso de un mes se le practicaron tres exámenes para determinar la consecuencia de su estado. El neurólogo personal de la familia diagnosticó, un “probable” virus cerebral, ante la posibilidad se lo medicó. Luego de 34 días la familia decidió llevarlo al hospital de Quilmes para que otros médicos evaluaran la situación. Dos días después de su llegada al centro, Carlos entró en un cuadro febril muy severo superando los 40 grados de temperatura que lo dejó inconsciente. Enseguida fue movilizado hacia Florencio Varela para realizarle una tomografía computada. El estudio dio que el 90 por ciento de su cerebro había sufrido un derrame, diagnosticado ACV. Automáticamente entró en coma durante un mes y medio, y un último examen de sangre determinó que había sido portador de Herpes simple.
Los médicos habían hecho todo lo posible, solo restaba esperar un milagro. Las neuronas perdidas ya no tenían posibilidad de restituirse ya que el derrame fue muy abarcativo y las consecuencias difíciles de superar. Durante dos años y medios la familia y los especialistas en rehabilitación trabajaron duro para poder sacarlo adelante pero el cuerpo empezó a deteriorarse y a generar otras complicaciones que llevo a que en el año 2009 Carlos falleciera.
Los riesgos especiales que afrontan las mujeres
Algunos factores de riesgo relacionados con el accidente cerebrovascular se aplican sólo a las mujeres. Figuran principalmente entre éstos el embarazo, el parto y la menopausia. Estos factores de riesgo están vinculados con las fluctuaciones hormonales y los cambios que afectan a las mujeres en diferentes etapas de la vida. La investigación realizada en estas últimas décadas ha demostrado que los anticonceptivos orales de dosis elevada, pueden aumentar el riesgo de accidente cerebrovascular en las mujeres. Afortunadamente, los anticonceptivos orales con dosis elevadas de estrógeno se han dejado de utilizar y han sido sustituidos por anticonceptivos orales más seguros y eficaces con dosis más bajas de estrógeno. Algunos estudios han demostrado que los anticonceptivos orales de baja dosis más nuevos pueden no aumentar notablemente el riesgo de accidente cerebrovascular en las mujeres. Otros estudios dieron que el embarazo y el parto pueden colocar a una mujer en situación de riesgo mayor para un accidente cerebrovascular.
Los riesgos en niños y jóvenes
Los niños tienen factores de riesgo que les son únicos. Las personas jóvenes parecen sufrir accidentes cerebrovasculares hemorrágicos más que accidentes isquémicos, una diferencia significativa frente a otros grupos de mayor edad, en los cuales los accidentes cerebrovasculares isquémicos constituyen la mayoría de los casos.
Entre las complicaciones médicas que pueden conducir a esta enfermedad en los niños figuran la infección intracraneal, la lesión cerebral, malformaciones vasculares tales como el síndrome de moyamoya, la enfermedad vascular oclusiva y trastornos genéticos, tales como la anemia falciforme, la esclerosis tuberosa y el síndrome de Marfan.
Por otra parte luego de pasar la etapa más conflictiva de esta enfermedad, llega el proceso de rehabilitación y es ahí en donde la familia cumple su rol más elemental.
La familia y la rehabilitación van de la mano
Ambas partes forman un conjunto más que importante para el paciente que sufrió un ACV, recuperarse de esta enfermedad depende del daño cerebral que haya sufrido el paciente. El grado de recuperación es mayor en los tres primeros meses, luego tiende a disminuir.
Un programa de rehabilitación consta en trabajar de manera física, social y psicológica con el enfermo. Los miembros que conforman el tratamiento y la familia diseñan un plan integral de trabajo para la recuperación y la adaptación. El objetivo es que el paciente logre desarrollar su máximo potencial en todas las áreas. En este tipo de enfermedades la familia es el sustento más importante.
En los tipos de terapias entran la física en la cual los fisioterapeutas evalúan a cada paciente desde el ingreso a fin de determinar su capacidad para realizar determinadas actividades, como pararse, sentarse, manejar una silla de ruedas y caminar .Asimismo la evaluación determina su capacidad motriz y neurológica. La idea de la terapia física es definir problemas, desarrollar un programa de tratamiento y plantear objetivos.
Los programas están hechos de acuerdo a las condiciones del paciente y consiste en actividades en colchonetas, secuencias de desarrollos en donde se trabaja la postura, coordinación y equilibrio, terapia en piscina (generalmente utilizada como terapia auxiliar) y ejercicios de fortalecimiento, donde se usan diferentes aparatos para fuerza.
También esta la terapia ocupacional lo cual se refieren a las actividades que ocupen el tiempo todos los días, tales como bañarse, vestirse, y alimentarse. Los terapeutas trabajan con lo que se refiere a sensorio- motriz ( el individuo conoce através de los sentidos y el movimientos), la utilización de brazos, piernas y músculos, la percepción que se basa en la manera de percibir los cinco sentidos y la cognición que es la manera de pensar, recordar cosas y solucionar problemas.
Por otra parte el tratamiento tiene fonoaudiología; la comunicación requiere la capacidad de entender lo que se dice y de poder hablar en forma clara y con significado. Asimismo provee una evaluación cuando existen dificultades en la deglución.
En la parte psicológica los especialistas estudian de cerca el accidente en el cerebro y trabajan en las disfunciones cognitivas y perceptivas al igual que los efectos emocionales del paciente y la familia. La última parte del proceso consta en la recreación terapéutica en la cual implica actividades de esparcimiento donde consiste en estimular al enfermo a sociabilizarse con su entorno. El proceso requiere de paciencia y amor, transmitirle a su ser querido acompañamiento y sobretodo fuerza para que él pueda sentirse querido y así sobrellevar de la mejor manera esta triste enfermedad.
